Hoy os traemos diferentes ideas para trabajar un corto de animación en la clase ELE, en este caso hemos elegido: La caja (La boite), un precioso corto animado sobre la empatía y el respeto a la vida.

Llevar cortos a nuestras clases suele gustar a nuestros alumnos porque les ayuda a practicar la lengua en un contexto más atractivo de lo que les suele resultar el libro, además, al durar poco tiempo consiguen mantener la atención más fácilmente. Asimismo, con los cortos podemos trabajar la comprensión auditiva, la expresión escrita y la expresión oral. En las explotaciones que se proponen a continuación se trabaja la expresión escrita y la expresión oral. Estas propuestas van dirigidas a estudiantes a partir de un nivel A2 hasta B2.

Normalmente, los cortos nos proporcionan multitud de opciones para practicar la lengua. En el caso del corto elegido podemos trabajar lo siguiente:

• Por un lado, podemos usarlo para practicar el léxico de la casa. Todo el corto se desarrolla en el interior de una casa así que tenemos mucho de lo que hablar.
• Por otro lado, podemos utilizar este corto para narrar en presente los hechos que aparecen. Podemos ir parando el vídeo para que vayan narrando poco a poco o podemos pedirles que, después del visionado, narren lo que han visto o incluso, si disponemos de los medios necesarios, podemos pedirles que pongan subtítulos al vídeo. Si les decimos a nuestros alumnos que el corto tiene lugar en un momento pasado, también podemos usarlo para practicar los pasados.
• También podemos usarlo para practicar las hipótesis parando el vídeo en los minutos 1:38, 2:41, 4:17 y al final del corto y preguntar a nuestros alumnos que piensan que pasará.
• Por último, podemos tratar la empatía, el respeto por los animales y los sentimientos con el visionado de este corto y aprovechar para llevar a cabo un coloquio sobre el tema, podemos hacer las siguientes preguntas:
  1. ¿Por qué crees que el anciano actúa de esta forma?
  2. ¿Qué harías tú en su lugar?
  3. ¿Qué siente el anciano por el ratón? etc.