Expresiones con la palabra leche
¿Qué significa «de mala leche»? ¿Es lo mismo que «de la leche»? Sus significados no podrían ser más distintos, ¿verdad? En este artículo hacemos una recopilación de expresiones con la palabra leche, incluyendo su significado y algunos ejemplos. Cuidado, hay que advertir a los alumnos que deberán usarlas en contextos informales, pues son expresiones coloquiales e, incluso, vulgares.
Estar de mala leche
Aunque alguien tenga una personalidad afable y alegre, es posible que tenga momentos en los que, por alguna razón, esté arisco, irascible, de mal humor. Ese alguien estaría, en esos momentos, de mala leche. También se escucha ‘ponerse de mala leche’ para poner el énfasis en que el cambio de humor ha sido repentino.
Ejemplos:
«Hoy me he levantado contenta, pero el atasco viniendo hacia aquí me ha puesto de mala leche».
«No le hagas caso. Está de mala leche porque no le hemos comprado el juguete que quería».
Tener mala leche
Si alguien tiene mala leche, mucho nos tememos, no es algo puntual o temporal, como en el caso anterior, sino una cualidad habitual en esa persona.
Ejemplo:
«Yo que tú se lo pediría a otro vecino. Don José tiene muy mala leche».
Alfred López, del blog Ya está el listo que todo lo sabe, nos cuenta el origen de esta expresión en este artículo.
A mala leche
Con mala intención.
Ejemplo:
«La última pregunta del examen la ha puesto a mala leche. Da igual si haces las demás bien; si no contestas a esa, no apruebas».
Ser la leche
Un giro completo de significado respecto a las expresiones anteriores. Si alguien o algo es la leche, es extraordinario. Puede significar ‘bueno’ o ‘buenísimo’, o ‘increíble’.
Ejemplos:
«Eres la leche, siempre te olvidas algo cuando salimos te viaje».
«Las fiestas de Salamanca son la leche, sobre todo las casetas de pinchos».
De la leche
Puede utilizarse para decir ‘fantástico’, ‘increíble’, o como adverbio de cantidad (‘mucho’, ‘muchísimo’). Con este último significado también hay otra expresión, ‘la leche’.
Ejemplos:
«Había un tráfico de la leche».
«El festival tiene un cartel de la leche. Me gustan todos los grupos que van a actuar».
«Ese chico sabe la leche. No me extraña que vaya un curso adelantado».
A toda leche
A toda velocidad o a todo volumen.
Ejemplos:
«Ven a toda leche, que el concierto va a empezar ya».
«No me extraña que se quejen sus vecinos, siempre tiene la música a toda leche».
Echando leches
Muy deprisa, a toda velocidad. Se suele acompañar de los verbos ‘irse’, ‘salir’ o ‘marchar’ y, todavía más vulgar, se puede decir ‘cagando leches’ en lugar de ‘echando leches’.
Ejemplos:
«Vístete cagando leches. Nos hemos quedado dormidos y llegamos tarde».
«Se fue echando leches cuando supo la noticia, ni siquiera nos esperó».
Darse una leche
También ‘meterse’ o ‘pegarse’ una leche. Significa darse un golpe.
Ejemplo:
«Me metí una leche con ese mueble ayer cuando volví de fiesta… Todo por no encender la luz para no despertar a mis padres».
Dar una leche
Darle una leche a algo o a alguien es pegarle un golpe. También se puede utilizar con los verbos ‘meter’ o ‘pegar’. Se oye frecuentemente ‘un par de leches’ o ‘un buen par de leches’.
Ejemplo:
«Le pegó una leche tremenda. Si yo fuera él, lo denunciaría».
¡Leche!
Con esta interjección indicamos sorpresa, admiración, asombro… También son frecuentes ‘leches’ o ¡la leche’.
Ejemplo:
«¡Leches! Tienes razón, este chico es increíble con los malabares».
Cagarse en la leche
Esta expresión es muy vulgar. Si alguien se caga en la leche está expresando su desagrado, enfado o disgusto.
Ejemplo:
«¡Me cago en la leche! Ya no quedan entradas, con las ganas que tenía de ir a ese concierto…».
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Créditos:
Foto destacada: «Sunset Splash» de Seth Kaplan bajo CC BY 2.0 vía Flickr.
Vectores utilizados para el vaso y la leche: freepik.com
Gracias. habéis quitados todas mis dudas a repecto del uso de estas expresiones.
Para mí resultó muy interesante leer este artículo. Sin embargo en mi país de orígen, Venezuela, las expresiones con leche son percibidas en general como vulgares y no se asocian al mal humor sino a la buena o mala suerte. Si decimos «tiene una leche!» significa que es un suertudo, pero si decimos «Qué mala leche!» significa que tuvo mala suerte en algo.